José María Sadia, La Opinión de Zamora
Toledo, Córdoba, Sevilla, Granada o Barcelona han sido la referencia
histórica de Sefarad en el país, el territorio de un país imaginario
nacido con los decretos de expulsión de los judíos a finales del siglo
XV. El "renacimiento" del interés por lo criptojudío -aquellos hebreos
que mantuvieron sus costumbres de manera oculta- ha destapado en las dos
últimas décadas la existencia de una huella sefardí también en ciudades
y pueblos no tan reconocibles, como Girona, Lucena o Hervás. Los
congresos celebrados en los últimos años y la venida de expertos de
Israel y Estados Unidos ha permitido que Zamora se una al club de los
territorios que interesan a aquellos judíos que quieren revivir, de
alguna manera, sus raíces.
Esta es la apuesta del recién creado
Centro Campantón, que ofrece las claves de este súbito resurgimiento. La
capacidad de Internet para "unir" a comunidades de judíos sefardíes en
todo el planeta, la muy reciente ley de nacionalidad en España y
Portugal y el interés de los grupos de ciudadanos influyentes en Israel
por conectar con la antigua Sefarad han colocado el asunto en primer
plano. ¿Por qué Zamora se ha unido al mapa sefardí? "Los historiadores y
estudiosos se han dado cuenta de que en Zamora había más de lo que se
pensaba". Lo dice el responsable del centro, Jesús Jambrina, quien
ofrece una realidad rotunda: "Salvo Toledo, ninguna ciudad ha producido
tantos sabios hebreos".
Una de las consecuencias más directas es
la incorporación de la provincia a los circuitos del llamado turismo
cultural. El grupo Raíces de Sefarad, que realiza viajes de carácter
educativo por España y Portugal, ha trazado una ruta que comienza en
Segovia y continúa por Toro, Zamora y Fermoselle, y finaliza, ya en
Portugal, en Miranda do Douro y Carçao. Pero, ¿dónde reside el interés?
"La cuestión de los criptojudíos está muy de moda, sobre todo, en
Portugal. Es un fenómeno antropológico por el cual muchos ciudadanos
reconocen sus orígenes hebreos en pleno siglo XXI", explica el
arqueólogo sefardí Ami Barr. Uno de los lugares donde está sucediendo se
encuentra muy cerca de la provincia: Tras os Montes. "Allí se calcula
que un tercio de la población tiene orígenes judíos", añade el
responsable de Raíces de Sefarad.
¿Qué tipo de personas
participan en los circuitos culturales de la antigua Sefarad? "Son
judíos sefardíes y askenazi -de Europa central y oriental- que regresan
por motivos sentimentales", precisa Barr. La elección de los lugares
tiene que ver con rutas poco conocidas y con vestigios arqueológicos. De
ahí que, aunque los miembros de Raíces de Sefarad ya conocen
emplazamientos como la capital o Fermoselle, tengan previsto acudir esta
semana a Zamora para inspeccionar algunos presumibles restos del paso
hebreo. Es el caso de la supuesta januquía labrada en un sillar de la
iglesia de San Ildefonso, el baño ritual que alberga la antigua Hostería
Real o la bodega de la plaza de Santa Lucía.